sordera en ancianos

La sordera en el anciano, ¿cómo podemos proteger su calidad de vida?

La hipoacusia o sordera en personas mayores es algo muy frecuente, sobre todo en las sociedades industrializadas, donde estamos sometidos a ruidos muy intensos durante toda nuestra vida. De esta forma, se estima que hasta un 30 % de las personas ancianas sufren problemas del oído, constituyendo estos la tercera afección crónica en la tercera edad después de los trastornos de las articulaciones y el corazón.

¿Por qué se origina la sordera en ancianos?

La presbiacusia o disminución de la capacidad auditiva ligada al envejecimiento se asocia principalmente a un déficit de los diferentes sistemas de integración cerebral, lo que provoca un déficit psicosensorial global. Lo que sucede exactamente es que las células pilosas que se encuentran dentro del oído interno (las cuales recogen las ondas sonoras y las convierten en señales nerviosas que el cerebro interpreta como sonido), se ven dañadas y van muriendo.

Se trata de un fenómeno normal que acostumbra a darse de forma gradual, progresiva, bilateral y simétrica.

¿Qué cosas nos deben hacer sospechar que existe un problema de sordera?

A menudo, la persona con sordera o dificultad auditiva presentan problemas para comprender el lenguaje que su interlocutor emplea, sobre todo si la conversación se produce en ambientes ruidos o con malas condiciones acústicas.

En cuanto al comportamiento de la persona afectada, resulta habitual que esta muestre una indiferencia hacia el mundo que les rodea que, a medida que aumenta la hipoacusia, tiende a ir en aumento. Además, es normal que nieguen que sufren este problema, lo cual suele ser motivo de conflictos familiares.

Por otra parte, la sordera puede inducir situaciones de desarraigo social, de forma que la persona solo participa cuando la conversación transcurre con lentitud o trata sobre un tema muy conocido para él.

¿Qué cosas pueden ayudarnos a mantener la calidad de vida de un anciano con sordera?

El tratamiento de una persona con sordera debe contemplar una serie de medidas generales. La más importante, identificar la afección causante del trastorno y prescribir una solución terapéutica (desde la colocación de una prótesis a una intervención quirúrgica). Además, resulta necesario tener en cuenta algunas consideraciones que ayudarán a mejorar su calidad de vida:

  • Hablarle mirándole a la cara, evitando en todo momento iniciar una conversación en la distancia.
  • Reducir en la medida de lo posible los ambientes ruidosos. Tratar de que el hogar constituya un espacio relajado y tranquilo.
  • Al dirigirse a él, pronunciar lentamente y, si resulta necesario, hacer gestos para apoyar lo que se está comunicando verbalmente.
  • Hacer comprender al resto de familiares y personas que conviven con él cuál es su situación y animarlos a tomar en consideración las anteriores medidas. Esto evitará que la persona afectada se vea abocada al aislamiento, la depresión y la incapacitación social.

¿Qué hacer cuando se sospecha que existe un problema de sordera?

Aunque el médico de Atención Primaria puede realizar un primer diagnóstico aproximado del problema, lo ideal es acudir a un especialista en otorrinolarongología que pueda realizar todas las pruebas necesarias para poder prescribir el tratamiento más adecuado.

Por ello, si estás sufriendo un problema de hipoacusia o cuidas de una persona anciana que está experimentando un trastorno auditivo, en Ototech podemos ayudarte. Ponte en contacto con nosotros sin compromiso y te explicaremos todo lo que podemos hacer por ti.

Dr. Martinez-Monche
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