A la mayoría de las personas les desagrada estar expuestos al ruido. Es lógico, es algo que suele irritar y que también estresa. Sin embargo, para algunas personas no se trata solo de una sensación de desagrado, sino que puede ser el origen a un problema mayor. Desde Ototech, expertos en acúfenos en Barcelona, te mostramos en qué consiste la ligirofobia, también llamada fonofobia.
Índice del artículo
¿Qué es la ligirofobia?
La ligirofobia es el miedo patológico a los ruidos muy intensos. Es cierto que es más común en niño pequeños, pero también puede darse entre personas adultas. En este último caso, es más frecuente cuando la exposición a esta clase de sonidos en frecuente.
Se trata de una fobia de tipo específico, puesto que el miedo se siente ante un estímulo concreto. El pavor se puede sentir tanto si la persona se expone al ruido como ante el temor de hacerlo.
Podemos ver las dos clases de miedo cuando se celebra cualquier fiesta que conlleve el uso de petardos. El paciente sentirá miedo al escuchar el ruido, pero también estará asustado porque sabe que en algún momento ocurrirá.
Aunque en muchos casos su origen es psicológico, también puede ser físico. Ocurre cuando se trata de un síntoma de la hiperacusia, que se da cuando disminuye la tolerancia al ruido por un problema en el oído.
¿Cuáles son los síntomas de la ligirofobia?
Como sucede con cualquier otro tipo de dolencia, la ligirofobia tiene unos síntomas concretos que permiten su diagnóstico. Es importante que conozcas que las fobias específicas suelen activar el sistema nervioso autónomo, que es el encargado de regular los movimientos involuntarios del cuerpo.
Cuando la persona que padece la fobia se expone a ella, se desatan algunos de estos movimientos involuntarios, como un aumento del ritmo cardíaco, sudor o hiperventilación. Los síntomas son muy similares a los de un ataque de ansiedad o de pánico, ya que en realidad es lo que está sufriendo el paciente.
Para que un profesional de la salud diagnostique una fobia el miedo debe ser irracional y no provocar ese mismo temor en personas que no sufran este problema. Además, la respuesta al estímulo será desproporcionada.
En algunos casos, la fonofobia puede no llegar sola, ya que es frecuente que la persona que la sufre pueda sentir temor a ciertos lugares porque los asocia al ruido.
¿Cuáles son las causas de la ligirofobia?
Como sucede con cualquier otra fobia, en muchos casos la ligirofobia está unida a una mala experiencia. En ocasiones es provocada porque el ruido realmente daña a la persona que los percibe y le ocasiona un malestar físico.
Por supuesto, influye en gran manera la personalidad del paciente y cómo responde a situaciones que le provoquen miedo. Incluso sus habilidades sociales o el apoyo familiar con el que cuenta puede ser determinante.
¿Cuál es el tratamiento de la ligirofobia?
Como ahora ya sabes, la ligirofobia tiene un diagnóstico relativamente sencillo, pero que debe efectuarse por un profesional médico. Una vez que se determina que existe el problema, es vital tratarlo cuanto antes.
Es cierto que en ocasiones cuando este tipo de fobias se dan en niños muy pequeños, al crecer y ser más racionales pueden desaparecer. Sin embargo, siempre debe ser evaluada la situación por un psicólogo.
Cuando el miedo impide a la persona realizar las tareas básicas de su vida, se deben poner en práctica ciertas estrategias que mejoren la situación. Estas son algunas de las que se pueden emplear:
- Desensibilización sistemática.
- Técnicas de relajación.
- Técnicas de imaginación.
- Exposición vicaria.
- Exposición en vivo.
- Reprocesamiento utilizando movimientos oculares.
- Aproximaciones sucesivas a las situaciones que provocan la fobia.
Si crees que puedes sufrir ligirofobia, no lo dudes y busca ayuda. Seguro que consigues recuperar el control de tus emociones.
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